Publicado el 18/Febrero/2009 | 00:02
Entrevista a Miguel Ángel Sánchez
¿Quien es? Doctor . Profesor de reproducción asistida de la Universidad Compliutense de Madrid
¿Qué es la bioética?
Yo entiendo la bioética como un movimiento ciudadano que no propone soluciones tajantes ni fórmulas mágicas, sino que busca la deliberación, la participación y la conciencia.
¿Qué es lo que pone en tela de discusión?
Problemas nuevos que no sabemos muy bien cómo tratar, y que las nuevas ciencias de la vida han traído
¿Como cuáles?
Por ejemplo, las posibilidades de mantenimiento artificial de las funciones vitales, los estados vegetativos permanentes o la muerte digna.
¿Y aquellos relacionados con la creación de la vida?
También hay debate sobre el principio de la vida, y tiene que ver con la reproducción y con el uso de embiones.
Dentro de la discusión, ¿qué papel cumple la bioética?
La bioética tiene que hacer conocer estos problemas. Su primera labor es la de la información y la divulgación de ellos. Es una labor de siembra.
¿Ya se ha definido cuál es el límite de la ciencia?
Hay una tendencia a pensar que la ética esta para prohibir. No es eso. Está para examinar y para descubrir posibilidades.
¿Luego de la discusión?
Tras el debate, tenemos que encontrar las mejores formas de encausar nuestro poderío tecnológico.
¿A través de legislación?
Yo soy de los que entienden que la bioética es más un movimiento de conciencia y que el bioderecho es otra cosa.
Pero, ¿se necesitan leyes?
Tiene que haber leyes para ciertas cosas. Pero no para todas. Y solo con leyes no se resuelven los problemas.
¿Cuánto hay de ideología o de religión en este movimiento?
Este es un movimiento universalista, pluralista, no confesional, más bien laico.
¿Cuál es su paradigma?
Gran parte de la bioética tiene que ver con el pensamiento liberal, que tiende a dar al individuo el control sobre su propio cuerpo y a elegir su propia vida.
¿Cómo cuaja este pensamiento en la realidad?
Está en el origen de las nuevas normas que propone la bioética sobre el consentimiento informado y la participación del paciente en la toma de decisiones.
¿Qué opina sobre la muerte de Eluana Englaro?
Cada caso es distinto. Pero me parece que este caso ha estado demasiado influido por factores que no deberían tener tanto peso.
¿Como cuáles?
Factores políticos y religiosos que han intervenido, cuando, en realidad, quien debe tener la última palabra debe tender a ser el propio interesado o sus familiares directos. (AIV)